jueves, 20 de febrero de 2014

Las calles

Las calles de Alicante, de Monóvar, de Denia, no estaban asfaltadas. Solo estaban adoquinadas algunas calles principales de Alicante, como la Rambla, Alfonso el Sabio, Calderón, y pocas más. Y las carreteras también estaban adoquinadas. El resto eran de tierra, y en ellas estaban marcados los surcos por donde pasaban las ruedas de los carros. Y cuando llovía, por esos surcos corría el agua como riachuelos, por donde corrían los barquitos que nosotros poníamos en el agua, que no eran otra cosa que trocitos de madera, o ramitas de árbol. Y se podía hacer presas en las que el agua caía como cataratas. Y después de la lluvia quedaba el barro, con el que podías moldear lo que tu imaginación quisiera...

No hay comentarios:

Publicar un comentario